¡BUENOS DÍAS MARIPOSAS!
Os dejo una pequeña reflexión personal sobre las redes sociales.
Partiendo de la definición que expone Wikipedia referida a las redes sociales como: “estructuras sociales compuestas de grupos de personas, las cuales están conectadas por uno o varios tipos de relaciones, tales como amistad, parentesco, intereses comunes o que comparten conocimientos” y, echando un vistazo a la realidad de nuestros días, deberíamos cuestionarnos… ¿es amistad, parentesco o uso de conocimientos lo que realmente se comparte? ¿Se le está dando el uso correcto a dichas redes y en coherencia con la definición que se plantea?
¿HASTA DÓNDE CON ÉSTAS REDES? ¿QUIÉN NOS “ESCUCHA” REALMENTE AL OTRO LADO DE ESTA COMUNICACIÓN INSTANTÁNEA?
Vayamos paso a paso…
Echando la vista años atrás, con la aparición y creación de las nuevas redes sociales, se abría un mundo complejo, extraño e interesante ante una sociedad ignorante en el ámbito de las nuevas comunicaciones. Aparecía así, un nuevo camino marcado por dos rutas paralelas: el primero, y más llano, se dirigía y se dirige en nuestros días, hacia el nuevo saber y conocimiento de multitud de temas de interés; el segundo, y con algún que otro desnivel, nos sitúa ante un posible peligro procedente del mal uso de estas redes en manos del desconocimiento humano, así pues, nuestra privacidad, nuestro yo más personal y la desconfianza hacia lo desconocido se rompían, en muchos de los casos, dando pié a la libertad de datos descontrolada.
Realmente ante este caos sobre el descontrol de los datos personales, debemos plantearnos dónde nace el riesgo de esta situación, si en las redes o en las propias personas, ya que se nos da la oportunidad de conocer, acceder y profundizar en un mundo que nos abre una puerta llena de sistemas alternativos y/o aumentativos de comunicación y que pone en nuestra mano el buen o mal uso de las mismas.
Hoy en día, tras las críticas y debates sobre estos temas que abarcan gran parte de nuestras horas diarias, y dirigiéndonos a la parte más técnica de este sistema, contamos con muchos recursos que facilitan el buen uso de estas redes, unos recursos que pueden ser utilizados tanto desde el ámbito de la enseñanza como en el contexto familiar. Es necesario difundir estas “medidas de seguridad” sobre todo en los menores, para dirigir su uso hacia el camino correcto, un camino sin elección de rutas y que se haga único y llano.
Para terminar, os adjunto un video relacionado con este tema, donde Eduardo Punset y Jamens Fowler nos hablan desde el enfoque más científico sobre el poder de las redes sociales desde su nacimiento hasta se madurez y haciéndonos pensar sobre la vejez de las mismas.
“Para saber quiénes somos tenemos que comprender cómo estamos conectados” (James Fowler)
¡Gracias por vuestros minutos en red mariposas!
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